El derechazo de Juan Olivares a los 18 minutos del segundo tiempo le dio la victoria al Gallo en la noche del sábado en el Nuevo Francisco Urbano, triunfo con el cual el equipo del Oeste quedó en el cuarto puesto de la tabla.
Por Ramiro Agustín Jara
“Quiero dar la vuelta, quiero ir a primera, quiero ser campeón”, era el cántico que caía de las plateas segundos antes de que el árbitro Felipe Viola hiciera sonar su silbato para decretar el final del partido. En esos instantes, la tensión y el nerviosismo se transformaron en algarabía y euforia por los tres puntos de oro que consiguió Deportivo Morón ante Nueva Chicago.
De entrada, el equipo de Walter Otta impuso sus condiciones y jugó el partido con intensidad y determinación: un remate de Yair González en la puerta del área que el arquero Facundo Ferrero envió al tiro de esquina fue, posiblemente, la ocasión más clara del primer tiempo.
Pero aquel protagonismo del equipo local no se sostuvo durante el resto de la primera etapa, ya que la falta de efectividad del Gallo y el orden táctico de los dirigidos por Lotito cambiaron el rumbo del partido en los minutos posteriores. Sobre el final del primer tiempo, Maggi había convertido para la visita, pero el tanto fue invalidado por fuera de juego.
No obstante, el equipo de Otta no cesó en su búsqueda y, en un complemento en el que no abundaron las situaciones de gol, un derechazo salvador de Juan Olivares a los 18 minutos del segundo tiempo que ingresó sobre el ángulo inferior izquierdo abrió el marcador.

El gol fue un golpe de knockout para el Verdinegro, que estuvo falto de ideas en la segunda mitad del encuentro. Además, los ingresos de Emiliano Franco y Gastón González le dieron piernas frescas al equipo local y le permitieron sostener la ventaja hasta el final del partido.
Los tres puntos obtenidos ilusionan a mas de uno en Zona Oeste: y es que el Gallo finalizó la fecha 28 en el cuarto puesto de la Zona B, a tan solo seis puntos del líder Gimnasia de Mendoza, rival al que enfrentará como local el próximo miércoles. Por su parte, el Torito de Mataderos cerró la jornada en el décimo tercer lugar, lejos de la lucha por el ansiado ascenso.
