Por Mariana Aulicino
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, nutre y cultiva las relaciones constantes con sus pares de los países aledaños, especialmente con la potente China. demostrando así que la hegemonía a la que tanto se aferran las antiguas potencias, está perdiendo poder día a día y que una economía polarizada ya no puede ser parte del mundo actual.
Ganándole a todas las presiones y esfuerzos exteriores, Rusia mantiene una templanza incólume frente a las sanciones y los ataques, y combate la crisis que le quieren imponer con una economía que no sólo se mantuvo en pie pese a los golpes, sino que sostuvo un crecimiento tenaz y continuo en los últimos años.
Algo de esto ya había adelantado el propio Putin en su famoso discurso en Múnich en la Conferencia de Seguridad en 2007: “La Historia de la humanidad conoce, desde luego, períodos de unipolaridad y aspiraciones a alcanzar el dominio mundial. Por mucho que se maquille este término, en la práctica solo significa una cosa: un solo centro de poder, un solo centro de fuerza, un solo centro de toma de decisiones.
(..) Las principales potencias deberían respectivamente edificar un sistema de relaciones económicas mundiales más justo y más democrático, en el que todo el mundo tenga las perspectivas de desarrollo”.
Así en 2009, se celebró la primera reunión de los Brics en Rusia.
¿Qué son los Brics?
Los BRICS son un grupo de cinco de las mayores economías emergentes del mundo: Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, cuyas iniciales forman el acrónimo (desde 2024 cuentan con nuevos miembros, por lo que ahora se denominan BRICS+).
El objetivo del foro es la cooperación económica, comercial, política y cultural entre los países “no tradicionalmente” potencias mundiales. De este modo, enfrentan de forma positiva y determinada a las economías hegemónicas dominantes dejando, entre otras medidas, de sobrevalorizar monedas como el euro y el dólar, limitando asimismo el poder de intervención sobre la economía de los países a instituciones como el FMI.
Así crearon el Nuevo Banco de Desarrollo y el Acuerdo de Reservas de Contingencia como mecanismos financieros alternativos a los gigantes monstrusos de Estados Unidos y la Unión Europea que han dominado nuestra economía, y por consecuencia nuestra vida cotidiana y real, desde hace siglos.
A diferencia de la coerción, la presión y la usura con que las economías principales han establecido su dominio, los Brics les hacen frente con cooperación, respeto por los bienes naturales de cada miembro, y ayuda mutua que tanto bien le hace a los países con menos posibilidades de resistir las sanciones y las tasas de intereses astronómicas que imponen estados como Estados Unidos.
La cooperación entre Municipios con los Imbrics
Dentro de los Brics, otra idea de contribución y participación comprometida fue la creación en 2018 de los IMBRICS, un foro patrocinado por los Brics en donde gobiernos municipales de los países participantes se reúnen a tratar temas claves para cada ciudad como economía e inversiones, construcción, comercio, desarrollo, industria, agricultura, ecología, turismo, cultura y educación, y deportes. Este año, el encuentro va a ser en Noviembre en San Petersburgo.
Uno de los errores económicos más significativos del gobierno de Javier Milei, fue rechazar la invitación a formar parte de los Brics que le hicieron a Argentina en Diciembre de 2023. Sin embargo, la puerta puede volver a abrirse cuando tengamos otra visión más independiente de nuestra propia economía y soberanía, cuando al fin le dejemos nuestro liderazgo político a personas que luchen por nuestra autonomía basándose en nuestra historia y nuestras enormes fuentes de recursos naturales.