Tras la victoria de Deportivo Madryn por 1 a 0 ante el Gallo, que le dio al Aurinegro la clasificación la final del Reducido de la Primera Nacional, se desató una pelea entre los jugadores y el cuerpo técnico que terminó con el accionar de la fuerza de seguridad.
Por Ramiro Jara
El pitazo final de Pablo Echavarría fue el puntapié para el descontrol en el Estadio Abel Sastre, tras la victoria por 1 a 0 de Deportivo Madryn sobre Morón que le dio el pase a la final del Reducido de la Primera Nacional al Aurinegro. Allí, el caos y el desorden tomaron protagonismo en una batalla entre los planteles que terminó con la policía tirándole gas pimienta a los futbolistas del Gallo.
El desconcierto comenzó en la mitad del terreno de juego, donde algunos de los jugadores de la visita se cruzaron con los del equipo chubutense, que intercambiaban palabras con sus rivales y alimentaban aún mas la tensión. Rápidamente, el cruce verbal se convirtió en trifulca directa entre ambos equipos.
A pesar de los intentos de algunos integrantes del cuerpo técnico, tanto de Madryn como de Morón, que buscaban apaciguar la violencia y frenar la pelea, la batalla siguió y se incrementó aún mas. Por si faltaba poco, empezaron a volar patadas como condimento añadido.